Por Everardo Ferrer. Publicado originalmente en Comikaze #13 (junio de 2011).
Al igual que El Enmascarado de Plata y El Demonio Azul, Tinieblas es un personaje que ha destacado en el mundo del fantástico mexicano, ya que ha ido más allá de los encordados para hacerse presente en medios como el cine, la televisión y, por supuesto, las historietas.
Si bien el personaje se creó desde finales de los 60 (como otra de las obras de Valente Pérez, llamado El Frankenstein de la lucha libre, pues era un verdadero hacedor de monstruos) e incluso ya había aparecido en cine, su debut como luchador se dio el 20 de agosto de 1971 en la Arena Coliseo, al lado de Black Shadow y Dorrel Dixon, enfrentando nada menos que a Renato Torres (El Hippie), El Solitario y Dr. Wagner. La presencia arrolladora del nuevo e inmenso luchador causó muy buena impresión entre el público, que de manera inmediata lo convirtió en estrella.
En el cine de luchadores, Tinieblas actuó al lado de los grandes del género, ya fuese como aliado o como rival. Su papel como Satán, en Las Momias de Guanajuato, le permitiría ser el verdadero estelar de la cinta, y aunque en sus siguientes películas imperó un espíritu estrambótico, (como en la saga de Los Campeones Justicieros o la de las mismas Momias de Guanajuato), tuvo la ocasión de actuar no solamente con los personajes enmascarados más taquilleros, sino también con las exuberantes Zulma Faiad y Grace Renat, así como del comediante Gaspar Henaine, Capulina, quien jugó un papel importante en su carrera mediática.
La imponente figura de Tinieblas lo hizo suficientemente atractivo como para estelarizar algunos relatos gráficos; así, en la década de los 70, llegó su fotonovela El Capitán Justicia y los Hermanos Nobleza, al lado de un jovencísimo Juan Gabriel (sí, el mismísimo Divo de Juárez). Posteriormente, ya con técnica de fotomontaje, se publicó Tinieblas: El Capitán Aventura, rango con el que sería conocido en los años 80, al convertirse, junto con Alushe, en protector de Capulina.
Posteriormente tuvo una participación importante en el programa Súper Vacaciones y formó parte de una campaña social de protección a los infantes, que lo encumbraron como un ídolo que, años más tarde, se convirtió en superhéroe de historieta.
Editorial Ejea, que se había anotado un hit con Sensacional de Luchas, comenzó a usar en dicha publicación personajes reales de la baraja luchística, por lo que Tinieblas se volvió una figura recurrente de la revista, en la que vivió aventuras relacionadas con la mitología maya. Cabe decir que las portadas, a cargo del maestrísimo Rafael Gallur, eran verdaderas obras de arte luchístico. La buena respuesta que obtuvieron las historias protagonizadas por El Gigante Sabio ocasionó que el público pidiera más del héroe enmascarado. Así, en julio de 1991 vio la luz el primer número de Tinieblas, El Hijo de la Noche, revista catorcenal con el mismo formato de Sensacional de Luchas. Si bien las historias de El Hijo de la Noche continuaron exaltando el universo maya, con el duende Alushe y la Princesa Olinka como personajes de apoyo, también se presentaron aventuras en lugares exóticos y escenarios urbanos.
Aunque por el título desfilaron excelentes artistas, como Ángel Mora (Chanoc), René del Valle (Kalimán), Juan Alba (El Pantera), Arturo Louga, Sergio García y un larguísimo etcétera, el arte de las portadas fue el encargado de hacer atractivo el producto. Y este fue realizado increíblemente por Rodolfo Pérez García, mejor conocido como Pegaso.
La saga de Tinieblas, El Hijo de la Noche cerró su ciclo con el número 58, ilustrado en su totalidad por Pegaso. La historia no se cortó de tajo, como se acostumbra al cancelarse un título, sino que se planeó para que llegara a buen término. Así, el Gigante Negro consumaba el acto sexual con Xtabay, diosa de la lujuria y la maldad, quien al apagar su deseo ya no tenía fin qué perseguir. La diosa volvía a los infiernos y El Señor Misterio, al lado de su padre, Zarlan, partía a un paraíso maya.
En 1999, en el marco de la convención CONQUE, se repartió un ashcan o historieta promocional de los proyectos de Shibalba, una nueva editorial. La portada presentó a Tinieblas como su carta fuerte. En este avance, Daniel Leal, cabeza del proyecto y representante de Tinieblas (así como personalidad secreta del personaje en este cómic), anunció un título que sería escrito por Juan Cristóbal Hernández, ilustrado por Gabriel y Tony Sandoval, y editado por Gaby Maya. En abril de 2000, cuando Tinieblas El Cómic fue lanzado en forma, la portada fue creada por Tony Sandoval, pero con guión y arte interior de Víctor A. Guiza, quien no mostró suficiente nivel para el proyecto.
Para el segundo número se contó con el arte de Paco Medina y Jorge Mercado, además de contar con una portada de Humberto Ramos, ya bien posicionado en la industria extranjera. Sin embargo, estos dos primeros números no lograron darle cuerpo a la historia, que fue muy confusa desde el principio. El tercer número fue una especie de reinicio para la serie, con Luis Gantús tomando las riendas del título como editor. Junto con Paco Espinosa en los guiones, Gantús logró enderezar el rumbo de la historia, mientras que Mercado parecía quedar como el dibujante regular y Humberto Ramos se apoyaba en Leonardo Olea para crear las portadas. Pero posteriormente a la parte gráfica se integraron Ulises Grostieta, David Carrillo y Arturo Anaya, por lo que el dibujo no terminó de cuajar.
Mención aparte merecen las historias complementarias Relatos de Yum Kimil, que presentaron los orígenes de El Guerrero Alushe y Olinka. Guionizadas por el mismo Paco Espinosa, fueron dibujadas por Tony Sandoval (quien todavía no definía su estilo), siendo lo más redondeado del título.
Para la novena entrega, que marcó el final de la saga, Tony se encargó de todo el arte de interiores, pero lamentablemente las diferencias entre el equipo creativo y los dueños del título provocaron que Tinieblas, El Cómic se cancelara justo cuando empezaba a tomar forma.
Estamos seguros de que, si regresara al mundo de las viñetas, Tinieblas seguiría siendo un personaje atractivo. Sólo es cuestión de dar con un equipo creativo que sepa inyectarle fuerza desde el principio. Más de cuatro décadas de historia bien valdrían la aparición de un nuevo cómic.
Actualización 18 de septiembre 2018
No sería mediante un sello mexicano precisamente, pero sí bajo una editorial con herencia latina que el concepto de Tinieblas regresaría al cómic.
Y es que justo este mes ha sido lanzado a la venta el one-shot Tinieblas Jr., uno de los nuevos títulos que Chido Comics, con base de operaciones en Tampa, ha creado junto con la empresa luchística Masked Republic, conformando así el Masked Republic Luchaverse, en el que también cohabitan luchadores como Rey Misterio Jr., Konnan, Solar, Super Astro, Penta Zero M y Rey Fénix, además de Tinieblas Jr.
En breve te presentaremos en este espacio una entrevista con los responsables de este interesante proyecto que promete llevar el cómic de lucha libre a un nivel nunca antes visto.
Datos Comikaze
+En un principio, el personaje de Tinieblas fue concebido como un luchador ciego, por ello la ausencia de facciones en su máscara.
+Tinieblas fue creado con el fin de convertirse en el enemigo principal de Mil Máscaras.
+El Increíble Profesor Zovek fue uno de los candidatos para personificar a Tinieblas.
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