Reseña: Poder Asesino. Novela gráfica interactiva

Mucho ruido está haciendo la obra escrita por el cineasta Luis Kelly, publicada gracias a Fondeadora y a la que Trilce apuesta con un nuevo tiraje. Según el autor, la novela emula la estética de El Libro Vaquero, pero más bien sigue el estilo de los sexacionales, y la truculencia del sexo como gancho ya ha sido usada en historietas como Lecumberri, ¡Denuncia!, Relatos de Presidio o Almas perversas.

Poder Asesino muestra pasajes de la vida política y criminal de un México ¿imaginario? a partir de un crimen en la residencia del presidente (parecido, por cierto, al Delmónicos, de Toukan). Casos como el asesinato cometido por los niños Salinas de Gortari, la vendetta entre Félix Gallardo y El Güero Palma, los narcosatánicos de Santa Elena, la masacre de Aguas Blancas, el inicio del narco-estado, o el asesinato de Colosio, son recreados como hipótesis del autor en historieta.

La parte gráfica recuerda a dibujantes como Juan Alba o Antonio Cardoso, pero con un estilo sensacional más bien genérico. Los artistas ocultan su identidad bajo el nombre de Estudio Fantasía, pero es probable que sean quienes hacen un cameo en el Café La Habana, frecuentado por dibujantes de la vieja guardia.

Destaca la parte interactiva, que usa la aplicación Layar para acceder a material de realidad aumentada (animación, música y poemas) y a las notas periodísticas que inspiraron la obra. Fuera de eso es una versión deslactosada de los sexacionales, a la que la falta de humor y el cinismo e impunidad de sus personajes convierten en una carísima edición de ¡Asi soy…! ¿Y qué?

Más información en www.poderasesino.com